Como duele ver,
que de nada sirvieron palabras y consejos,
al observar un absurdo proceder,
el cual a muchos deja perplejos.
Que duro es despertar de un dulce sueño,
en un mundo lleno de pesadía,
cuando se deja de ser el dueño
de aquello que creías tuyo algún día.
Si fácilmente defraudan nuestra confianza,
y nos encontramos siendo por la espalda atacados,
por un ser en el cual depositamos una esperanza
y por este vil mente nos vemos traicionados.
Se rompe en pedazos el corazón,
echando por el caño tantas expectativas,
cuando el futuro se vuelve desilusión,
al tomar decisiones conflictivas.
Qué difícil es ser padre ahora lo comprendo,
aunque mucho me he esforzado,
existen cosas que aun no entiendo
y de eso me encuentro apesadumbrado.
Me pregunto ¿en qué me equivoque?,
¿en que he fallado?
si siempre lo mejor le procure,
sin embargo eso no le ha importado.
Busco consuelo en días pasados,
en un baúl de recuerdos y fotografías,
donde sus te quiero están encerrados,
pero en el presente son solo tonterías.
¿En qué momento perdí el control?,
que ni cuenta me he dado,
¿cuándo olvide en este mundo mi rol?
y hoy el precio he pagado.
Lagrimas brotan por mi mejía,
pero no se de que son,
acaso serán de melancolía,
tristeza o desilusión.
Mi pensamiento se ve dividido,
y mi corazón revota en el pecho,
mi cerebro esta confundido
por lo que tu me has hecho.
Traición disfrazada de individualismo,
haciendo uso de razón amarilla,
en donde pudo mas tu egoísmo,
que al amor que sabes que por ti tenia.
Solo pido que Dios te bendiga
en los días venideros,
pues eres la mayor de mi vástiga
pero debes de escoger tus propios senderos.